Por @Javierandres.mo
Son casi las cinco de la tarde en Santiago de Chile, es tiempo de llamar a nuestra siguiente entrevistada.
Se trata de Anahi Vega, una estudiante de quinto año de Derecho, con 23 años, crossfitter y vegana. Para quienes dicen que no se puede ser una buena deportista siguiendo un estilo de vida con una dieta basada en plantas.
Con el compromiso de que me comunicaría con ella en cuanto estuviese disponible para darnos a conocer su experiencia y conocimiento del tema. Anahi, fiel a su palabra me contesta de inmediato.
Con una voz muy amable comenzamos a conversar para saber que hay detrás de Anahi Vega, junto con su luz, amor y simpatía por la vida.
¿Cómo ves el veganismo como estilo de vida?.
Veo el veganismo como un estilo de vida que nos sensibiliza a todo tipo de vida, ayudándonos a comprender que todo ser vivo es merecedor de respeto, amor y de no ser usado como mercancía. Nos abre los ojos sobre la verdad detrás de la gente que dice amar a los animales, que tiene mascotas, pero aun así ponen en su plato un pedazo de carne de vacuno, un pescado o un pollo, y lo hacen por la simple razón de que consideran ciertas especies dignas de ser protegidas y al resto las consideran mercancía, comida. Esta diferenciación es arbitraria y al serlo es injusta, es especismo.
El veganismo nos concientiza de la proveniencia de nuestros alimentos y de todo lo que consumimos en realidad, nos hace conscientes de la crueldad e injusticia que hay en su proceso de producción.
Sabiendo todo lo que hay detrás de la industria ganadera es difícil mantenerse indiferente, al menos para mí, porque la única razón por la que la gente se mantiene omnívora y decide no informarse del proceso de producción de lo que consume es por flojera, comodidad y costumbre. Yo misma tuve esa flojera y desmotivación de informarme porque me era incómodo saber lo que se hoy y no hacer nada al respecto.
Para ser sincera, me gustaría que todo el mundo pudiera plantearse la posibilidad de volverse vegano, que quisieran informarse y hacer el cambio. No creo que se deba imponer ni que se deba predicar una superioridad moral por ser vegano, pero sí me encantaría que todos tuvieran las ganas y necesidad de hacerlo.
¿Cuál es tu percepción del cuidado de nuestro planeta y por el respeto a los animales?.
Creo que es primordial. Hoy estamos en un punto crítico con el cambio climático, debe haber cambios drásticos y rápidos para revertir el escenario fatal que nos espera y el veganismo es la piedra angular para poder revertir esta situación.
Creo que el cambio climático es y debe ser una de las razones que más motiva a la gente a volverse vegana, sin embargo, por sí sola creo que no logra convencer a la gente por completo. Yo, en septiembre del 2019 hice mi transición al veganismo. No fue la primera vez que traté de dejar los productos de origen animal en todo caso, ya que en el 2016 traté, pero por falta de convicciones, ignorancia y flojera creí que mi cambio no haría ninguna diferencia, ya que en ese tiempo solo consideré el cambio climático como motivación.
En este segundo intento, en el año 2019, fue distinto ya que tomé conciencia de la inconsecuencia en cuidar y querer a ciertas especies como mascotas y de usar a otras como mercancía. Tomé una postura antiespecista y mucho más tajante en contra del maltrato animal, conciencia que en mi primer intento no tuve. Esto, más la conciencia previa que tenía sobre el impacto de la industria ganadera en el medio ambiente por ser el mayor emisor de gases de efecto invernadero, me hizo querer cambiar mi estilo de vida al veganismo definitivamente.
En relación con la espiritualidad, ¿crees en algo?.
Me considero agnóstica, fui cristiana hasta los 15 años y con el tiempo cambié por diversos motivos, dejé de creer en la iglesia y Dios como el cristianismo lo presenta. Creo que el cristianismo al igual que la mayoría de las religiones fueron creadas como medios de control de las masas y que en muchos aspectos son muy dañinas.
Hoy creo en las energías y que tenemos la capacidad de ser mejores personas cada día, que tenemos el mando de nuestras vidas, de que podemos convertirnos en lo que queramos ser y que nuestras decisiones afectan e influyen a otros por lo que debemos ser responsables en cómo decidimos relacionarnos con el resto, ser conscientes, tolerantes y respetuosos del otro, de su libertad de escoger su camino.
Respeto mucho todas las creencias, pero creo que uno tiene que echar mano buscar ser nuestra mejor versión, entregar lo mejor de nosotros siendo autocríticos y buscar el equilibrio entre el amor propio y el amor al prójimo. La paz mental y la paz en cómo nos relacionamos con el entorno están conectadas. El mismo amor que profesan las religiones puede ser encontrado en uno mismo sin el tinte ideológico y adoctrinamiento que todas traen.
Creo mucho en la comprensión y comunicación entre todos ya que esta es la clave para la armonía y el respeto hacia todo ser vivo.
¿Cuál crees que es el propósito de tu existencia?.
Creo que todos los seres humanos somos parte de un engranaje de interconexiones de relaciones con distintos elementos del mundo. Dicho esto, creo que el propósito de mi existencia es vivir, absorber experiencias para aprender y ser mi mejor versión para poder entregar y conectar con distintos seres vivos, luchando por lo que creo que es correcto y justo.
Desde que empecé en el veganismo, siento que puedo mirar a otros seres vivos sin culpa. Nunca pensé que pudiera tener conectar con seres con quienes tenemos poquísimas cosas en común. Finalmente he aprendido que el amor mueve al mundo y que todo ser vivo, sea la especie que sea, es susceptible de recibir y dar amor.
En resumen, mi propósito es reunir mis experiencias y estar conectada con mi entorno, desde el amor, la conciencia y la sensibilidad de entender que todos somos uno.
Redes de Anahí IG @ANAHI.VE